El pasado jueves 16 de Febrero de 2017 tuvo lugar en la Jornada Técnica ENOMAQ 2017 dentro del recinto ferial de Zaragoza. Dicha jornada fue coordinada por La Semana Vitivinícola y tuvo como tema principal el vino y la sostenibilidad. La OIV estuvo bien presente y representada por su Vicepresidente Vicente Sotés y contó con la intervención del jefe de Unidad de Viticultura, Mario de la Fuente.
Durante el transcurso de esta jornada, presididas por el director de la Feria de Zaragoza (Rogelio Cuairán) y por el Director de la Semana Vitivinícola (Salvador Manjón), se ha contado con la participación de investigadores procedentes de diversos centros de investigación y/o universidades, así como la representación de la Federación Española del Vino a través de su Vicesecretaria General, Susana García. Asimismo, contó con la participación de técnicos, productores, bodegas y profesionales del sector vitivinícola, estudiantes, etc. reuniendo así a alrededor de 150 personas en dicho evento.
Las presentaciones se organizaron según tres bloques temáticos: Viticultura, Enología y Marketing del vino.
En total, siete ponencias que abordaron la gestión integrada y sostenible del viñedo, el uso de nuevas variedades resistentes a enfermedades fúngicas (con una exposición de caso práctico en bodega), claves y nuevas tecnologías para la sostenibilidad en la bodega, precio de vinos sostenibles y certificaciones de diferentes tipos de vinos.
Dichos debates han contribuido esencialmente a la transferencia tecnológica de estos avances para el sector vitivinícola y, especialmente, a la percepción del concepto de sostenibilidad y su posible aplicación práctica en la empresa vitivinícola.
La vitivinicultura sostenible es un eje prioritario para la OIV, como así atestigua la promoción de una viticultura sostenible dentro de uno de sus cinco ejes estratégicos para el plan estratégico 2015-2019. Entendiendo como sostenibilidad todo lo que implica, la OIV viene trabajando desde 1997 en diferentes resoluciones: en producción integrada (VITI 1/1999; CST 2004); en la preservación de la biodiversidad (VITI 01/2002); en producción orgánica (ECO 460/2012) y, por supuesto en producción sostenible con la resolución sobre el desarrollo de la vitivinicultura sostenible (CST 2004); la guía de la vitivinicultura sostenible (CST 2008) y la particularización para vitivinicultura sostenible de la uva de mesa y uvas pasas (VITI 422/2011).
Cuando se aborda la sostenibilidad en el sector del vino, es necesario recordar que se debe hacer desde cuatro pilares fundamentales: medioambiente, social (seguridad y sanidad alimentaria), cultural y económico. La OIV viene recientemente de adoptar en su Asamblea General en Bento Gonçalves, (Brasil, Noviembre 2016) los “Principios generales de la OIV para una vitivinicultura sostenible. Aspectos medioambientales, sociales, económicos y culturales”, en forma de resolución CST 518-2016, la cual nos permite distinguir los principios generales de la sostenibilidad de los métodos de producción que incorporan de forma total o parcial estos principios.
Las iniciativas sostenibles requieren de una planificación, vigilancia y valoración de conocimiento. Es un proceso en constante evolución que requiere por lo tanto, una mejora y evaluación continua.
Es por ello que la OIV dentro de su plan estratégico de trabajo, en 2015 decidió reestructurar sus grupos de trabajo creando el grupo multidisciplinar y horizontal sobre “desarrollo sostenible y cambio climático (ENVIRO)”.
Fruto de ello, diversas iniciativas ligadas a la sostenibilidad están en marcha dentro del trabajo de este grupo de expertos, como por ejemplo:
- RSE; responsabilidad social empresarial y la sostenibilidad (ISO 26000). Adaptación a la vitivinicultura (proyecto de resolución CST 13-530).
- Protocolos y recomendaciones sobre el cálculo de GEI.
- Recomendaciones para la gestión sostenible del agua (proyecto de resolución VITI-TECVIT 16-569) y sobre la metodología a aplicar en el cálculo de la huella hídrica.
- Buenas prácticas o uso razonable de pesticidas en viticultura (proyecto de resolución VITI-PROTEC 16-592).
- Biodiversidad funcional.
- Preservación de variedades y procesos de selección (proyecto de resolución VITI 14-564).
- Gestión de co-productos en viticultura.
- Resilencia y cambio climático: estrategias de adaptación del sector vitivinícola al cambio climático.
Todos estos temas fueron abordados en mayor o menor medida durante las jornadas y, aunque muchos interrogantes y retos quedan abiertos para el futuro. La OIV espera tener un papel principal y poder seguir trabajando juntos hacia una vitivinicultura más sostenible.