Sobre la base del The Global Burden of Disease Study (GBD), un estudio observacional y global de tipo epidemiológico en el que se describe la morbimortalidad de las principales enfermedades, lesiones y factores de riesgo para la salud, la experta de Wine Information Council expuso una presentación sobre la importancia del análisis crítico de las publicaciones científicas y de poner los resultados en perspectiva y contexto.
Cuando se analiza el consumo de alcohol, es importante poner los resultados en el contexto de la dieta y los hábitos. No bebemos alcohol como tal, sino que bebemos cerveza, vino y bebidas espirituosas, y no solo bebemos, pues también comemos. Hay otros factores que afectan a nuestra salud. En otras palabras, debemos tener en cuenta el contexto y no solo el consumo de alcohol.
De hecho, es fundamental tener en cuenta los hábitos. Es importante, por ejemplo, si se bebe de manera moderada u ocasional y si se bebe con o sin las comidas. Además, a la hora de analizar el consumo de alcohol, debe tenerse en cuenta el tipo de bebida, la dieta, el tabaquismo y la actividad física, así como las características socioeconómicas.
Durante la reunión de expertos, se analizó profundamente la importancia del análisis crítico de las publicaciones científicas. Los expertos van a comenzar a preparar un documento sobre la evaluación de las ventajas y las desventajas de los distintos modelos epidemiológicos y las limitaciones más importantes por lo que respecta a la interpretación de los resultados.
El Grupo de expertos también presentará un nuevo eje a través del que pretende determinar si existe alguna diferencia entre el efecto del consumo de alcohol —del vino en particular— cuando se consume solo y como parte de la dieta. Se trata de una parte importante de la investigación que debe realizarse.
Parece que se observan ventajas cuando se tienen en cuenta los patrones alimentarios más que los nutrientes y las comidas específicos. Las comidas no se consumen por separado y los efectos en la salud son acumulativos e incluso sinérgicos.
Para saber más, póngase en contacto con Barbara Iasiello, jefa de la Unidad “Seguridad y Salud”. sanco@oiv.int