Hace un mes, en la sede de la OIV y rodeado por dos generaciones de sus exalumnos, estaba celebrando el trigésimo aniversario del Máster de la OIV en Wine Management que él mismo había impulsado.
Graduado de la Facultad de Derecho y del Centro de Estudios y de Perfeccionamiento para la Inspección de la Represión de Fraudes, el señor Tinlot comenzó su carrera como jefe de la sección Litigios de la Brigada Nacional de Control de Vinos y Bebidas Espirituosas (1964-1970), después como jefe de la Oficina de Vinos y Bebidas del Ministerio de Agricultura (1970-1981).
En su calidad de inspector general de represión de fraudes, fue nombrado por Francia comisario general para organizar las asambleas generales de la OIV de 1975 y de 1982 que se celebraron en París, donde fue relator de los temas relacionados con las denominaciones de origen y la calidad de los vinos. De 1982 a 1985, presidió el Grupo de expertos "Reglamentación y Control de la Calidad" de la OIV.
Su pericia en asuntos jurídicos y su conocimiento del sector vitivinícola lo llevaron a presidir el Grupo "Vino" (1979) y el Grupo "Bebidas Espirituosas" (1984) en el Consejo de Ministros de la Unión Europea, a participar de la Revisión del Convenio de París de la OMPI, a desempeñarse como vicepresidente del Grupo "Vino" de la FAO (1983) y como jefe de la delegación francesa en la Comisión del Codex Alimentarius.
Se convirtió en adjunto del director de Consumo y Represión de Fraudes, y, en 1985, fue elegido director general de la OIV, puesto que ocupó hasta 1996 y desde el cual impulsó el desarrollo de las actividades de la OIV, que, en ese periodo, pasó de 33 a 46 Estados miembros.
Apasionado de la historia y del derecho vitivinícola, y orgulloso de su origen borgoñés, creó el primer curso de Derecho del Vino en 1971 y disfrutó de compartir su pasión con los estudiantes de Enología, de Economía, de Agronomía y de Derecho de numerosas universidades francesas. De este modo, concibió la iniciativa de crear la Asociación Internacional de Juristas del Derecho de la Vid y el Vino (AIDV) en 1987 y la Asociación Universitaria Internacional del Vino (AUIV), que tomó a su cargo el máster de la OIV en Wine Management.
Durante 20 años, continuó brindando sus conocimientos en la AIDV, en la Academia Amorim que presidía y en la cátedra de la Unesco "Cultura y Tradición del Vino" de la Universidad de Borgoña.
Con sus grandes dotes diplomáticas, nos dejó el recuerdo de un director de la OIV apasionado y creativo, al servicio del mundo de la viña y el vino que tan bien conocía.
La OIV honra su memoria y hace llegar a su familia su más sentido pésame.